Negrita es parte de nuestra familia

Negrita es una marca que me ha acompañado toda la vida. Recuerdo cuando mi mamá nos preparaba a mis hermanos y a mí deliciosas compotas con chuño y maicena y le daba ese toque especial a todos sus postres con esencia de vainilla Negrita.

Ahora me toca a mí engreír a mi familia, así que siempre preparo refrescos Negrita para acompañar el almuerzo y cena. El favorito de mis hijos es el de chicha morada, a mi esposo le encantan los de frutas: naranja, piña, durazno, fresa y maracuyá y, a mí, los sabores peruanos: emoliente y cebada.

También, disfrutamos en familia de Frutísimos, los refrescos que son parcialmente endulzados con Stevia y ¡no tienen azúcar!. Nos encantan porque los sabores son súper naturales: chicha morada, naranja, piña, durazno, granadilla, maracuyá y mandarina. ¡Ah! Y Frutísimos también tiene gelatina bebible de fresa, que no se cuaja y la puedes preparar en frío y en caliente. 

Gracias a Negrita, en mi casa nunca falta el postre. Cada vez que nos provoca, preparo en un ratito mazamorra morada, de piña o de durazno; flan de vainilla o pudin de chocolate. Y cada vez que nos provoca algo dulce y ligerito preparo gelatina, que viene en riquísimos sabores: fresa, piña, naranja, uva, limón y granadilla.

¡Negrita es parte de mi familia!