¡Prepárate para tener un año increíble!

Te cuento que yo, cada vez que un año está a punto de terminar, me tomo unas horas para estar conmigo misma. Me voy a un parque o algún café en el que pueda estar tranquila y me pongo a pensar sobre todo lo que ocurrió. Repaso lo bueno, lo malo y lo inesperado de los meses que se fueron y lo voy apuntando en una libreta. Luego, agradezco por todo lo que aprendí de eso.

Te recomiendo que lo hagas tú también. Tómate tiempo para sentir y conectarte con tus emociones. Reflexiona sobre cómo estuvo tu año y apunta las cosas que te marcaron. Escribirlas te hará consciente de ellas y te darás cuenta de que de lo malo siempre se sacan lecciones y que las cosas buenas te hacen sentirte afortunada. Sentir el corazón lleno de amor y gratitud cambiará tu energía. Serás más positiva y eso te ayudará a traer a tu vida más alegría y abundancia.

Una vez que has agradecido por todo lo que pasó, prepárate para tener un año nuevo increíble. Estas son las cosas que debes hacer para atraer todo lo bueno que esperas:

Agradece. Está comprobado que ser agradecidos produce cambios bioquímicos en nuestro cuerpo y en lo que proyectamos al exterior. Y esto tiene consecuencias directas en cómo nos sentimos y lo que atraemos a nuestra vida. Agradece siempre por cada cosa, por pequeña que te parezca. Por tu salud, por las personas que tienes en tu vida, por tu trabajo, porque no te falta la comida, por cada una de las cosas a las que ya te acostumbraste tener pero que, en realidad, son un regalo. 

Enfócate. Hay personas y situaciones que no puedes cambiar. Renegar de eso es una pérdida inútil de energía, no te hará sentir bien y te convertirá en alguien que no sabe disfrutar de la vida. Enfócate en las cosas buenas y trata de ver lo mejor de cada situación. 

Decreta. Las palabras son poderosas. Decretar es afirmar y tener la convicción de que va a pasar lo que esperas. Si quieres que algo se cumpla, ¡grítalo! Siente que así será y agradece por adelantado, pues esa es la muestra más grande de fe. 

Confía. Una vez decretado, intenta no pensar en ello, pues cuando pensamos demasiado solemos ponernos pesimistas. Confía en que se dará lo mejor para ti. 

Visualiza. Todos los días, tómate unos minutos para visualizar tu deseo. Debes verlo en tu mente y sentir que ya lo tienes. Verás que en el momento menos pensado, se hace realidad. Esto funciona pero si crees en ello. Existen muchos libros y testimonios sobre el poder de la visualización y el poder de la mente que te ayudarán a utilizar tu imaginación a tu favor.  

Siempre positiva. Las personas somos como un imán. Si emitimos energía positiva con nuestros pensamientos y sentimientos, atraeremos más energía positiva y cosas buenas. ¡Compruébalo! 

Suelta. Olvídate de lo que no puedes cambiar. Evita pensar en cosas malas del pasado y libérate de esas ataduras. Deja de culparte por lo que podrías haber hecho o dicho. ¡Es imposible retroceder el tiempo!

Limpia. Tu casa, tu mente, tu vida, tus relaciones. Cada inicio de año es una gran oportunidad para hacer una limpieza general y deshacernos de lo que ya no nos sirve. Eso dará espacio para que lleguen nuevas y mejores cosas.

Deja que fluya. A veces, esperamos tanto algo que no nos damos cuenta que estamos recibiendo algo mejor de lo que habíamos pedido. Debemos abrirnos a las posibilidades y dejar de ir contra la corriente.

Ponte metas pero disfruta el presente. Algunas cosas no se consiguen de la noche a la mañana. Si tu meta para este nuevo año es llegar a tu peso ideal, ahorrar para hacer ese viaje que tanto quieres, iniciar tu propio negocio o casarte, ten en cuenta que todas esas cosas requieren de planificación, tiempo y no darte por vencido. Ponte metas a corto plazo y disfruta del proceso.

¡Que tengas un maravilloso año 2018!