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Diferénciate de tu competencia y venderás más

03.09.2020

  • Emprendimiento
¿Qué les estás ofreciendo a tus clientes que tu competencia no les ofrece? Si no tienes la respuesta, es momento de buscarla. Aquí te cuento porqué:
Hagamos un ejercicio. Piensa cuáles son tus marcas favoritas, esas que no cambiarías por nada. Ahora piensa qué tienen esas marcas que hacen que las prefieras. Los productos que ofrecen pueden ser parecidos a los de su competencia, pero hay algo que las hace especiales... ¿Será el sabor?, ¿el precio?, ¿el empaque?, ¿el servicio posventa que ofrecen? De repente, la razón por las que las prefieres es emocional: te hacen acordar a algún episodio feliz de tu infancia o tu mamá las compraba cuando eras pequeña y por eso ahora las compras tú. 

Puede ser una o muchas las razones por las que eliges una marca entre las demás, y eso es lo que tienes que conseguir con tu marca. Llegó el momento de preguntarte: ¿Qué les estás ofreciendo a tus clientes que tu competencia no les ofrece? Ese valor añadido es lo que te diferenciará y hará tu oferta irresistible. Si aún no lo sabes, es momento de encontrarlo.

Para encontrar esa ventaja diferencial debes mejorar lo que hay en el mercado y darle tu toque personal. ¿Qué cosa hace falta en el rubro de la repostería?, ¿En qué puedes innovar?, tómate el tiempo para pensar sobre esto.

Para que te sea más fácil, te cuento las características que debe tener una ventaja diferencial:

Exclusiva. "Eso" que vas a ofrecer solo lo debe ofrecer tu marca. Si tu competencia también lo hace, entonces deja de ser un beneficio exclusivo.
Valorada. Tus clientes deben recibir más de lo que esperan por su compra. No se trata de realizar una simple transacción comercial, debes ofrecerles una experiencia que ellos valoren.
Redituable. Tu diferencial debe generarte beneficios. Está muy bien hacer lo posible por atraer más clientes y mantener contentos a los que ya tienes, pero todo lo que hagas tiene que generar ganancias, sino deja de ser un negocio.
Superior. El beneficio que ofreces debe ser mejor a los que ofrecen los demás. De lo contrario, no te elegirán.

Los diferenciales no tienen que ser grandes innovaciones. Existen muchas formas en las que te puedes diferenciar de tu competencia. Aquí te cuento algunas:

- Por atención. Los clientes felices cuentan a otros su experiencia y siempre regresan. Por eso, debes asegurarte de que la experiencia de compra que les ofrezcas sea lo más agradable posible. Esto es especialmente importante en la repostería, pues los productos que vendes dan y acompañan momentos felices. Tus productos siempre deben estar perfectos, pero, además, debes brindar un trato cálido y cercano y un buen servicio de posventa. 

Cada vez que tus clientes te visiten pregúntales si les gustó la torta que compraron, atiende siempre sus preguntas y soluciona sus reclamos con la mejor disponibilidad. Pregúntales también qué otros postres les gustaría que ofrezcas. Conversando con ellos sabrás lo que quieren y necesitan y eso te ayudará muchísimo a mejorar y a marcar la diferencia. Te aseguro que las respuestas te sorprenderán.

- Entrega. Recuerda que un gran producto debe tener un gran empaque. Asegúrate de que las cajas, bolsas y todo lo que uses para entregar tus productos tenga la identidad de tu marca. Además, que sean realmente útiles. Los empaques, además de verse bien, deben de ajustarse a las proporciones de las tortas para que lleguen en su mejor forma a su destino. Por otro lado, piensa cómo puedes mejorar el servicio de entrega. ¿Has pensando en implementar el servicio de reparto? Esto podría animar a tus clientes a realizar pedidos más seguido. 

- Conocimiento. Debes demostrarles a tus clientes que estás al tanto de lo último en tendencias en repostería. Cuando te hagan algún pedido, sugiéreles novedades de acuerdo a sus gustos y necesidades. 

- Calidad. Esta es, sin duda, la mejor forma de destacar. La calidad hará que tus clientes elijan tu marca no porque sea la más barata o la primera que encuentran, sino porque realmente la prefieren. Asegúrate de que tus productos siempre estén frescos y deliciosos. 

- Servicios complementarios. De lo que se trata es de ofrecerle más a los clientes. Ellos ya conocen la calidad de tus postres... ¿Qué tal si dictas una clase de repostería especial para Navidad, por ejemplo?, ¿repostería para niños, quizá? Son muchas las posibilidades, solo tienes que ponerte a pensar en ellas y ver si son viables y convenientes.

- Detalles. ¿Es el cumpleaños de tu cliente estrella? ¡Mándale su torta favorita de regalo! ¿Varios de tus clientes no te hacen pedidos hace tiempo? ¡Mándales una cajita de alfajores, galletas o lo que sea que hagas! Ellos quedarán encantados con el detalle y comprobarán que te acuerdas de ellos y sus preferencias. Como te dije antes, esto es más que una simple transacción comercial.

- Precios. Aunque el precio es importante para tomar una decisión de compra, no te conviene entrar en una guerra de precios, pues siempre habrá quien tendrá precios más bajos. Esta estrategia puede hacer que atraigas más clientes en corto plazo, pero en algún momento tendrás que subir tus precios para no poner en riesgo la estabilidad de tu negocio. Así que, lo mejor, es que te centres en las otras formas de diferenciarte de tu competencia.

De lo que se trata es de conocer a tu competencia y construir una relación de confianza con tus clientes. No existe otra forma garantizada de vender. Y, mi última recomendación es que nunca dejes de aprender. Cada uno de tus productos lleva tu firma personal: tus ideas, habilidades, experiencia y cualidades personales se ven reflejados en ellos. Además, recuerda que es súper importante que hagas tus postres de muy buen ánimo.