Conocer tu tipo de cuerpo es el primer paso para lucir siempre perfecta

Hoy acompañé a una amiga a buscar un vestido para el matrimonio de su hermana. Después de recorrer muchas tiendas y cuando estábamos a punto de darnos por vencidas, mi amiga quedó deslumbrada: encontró el modelo perfecto, tal como si lo hubiera mandado a hacer.

La emoción le duró hasta que salió del probador. Se miró al espejo y no le gustó para nada cómo le quedaba. La vendedora le explicó que ese modelo no le favorecía, y le dio otro vestido, que según ella, le quedaría espectacular. ¡Eso fue precisamente lo que sucedió! Quedamos impresionadas, porque nosotras nunca lo hubiéramos elegido.

¿Por qué pasa esto? Porque no se trata de usar lo que está de moda, sino de aprender a usar las prendas que nos favorecen. No importa cuál sea nuestro peso, talla o figura. Nos veremos mejor, más estilizadas y esbeltas si vestimos ropa adecuada, que nos sienta bien. 

Para conseguirlo, el primer paso es conocer nuestro cuerpo. Luego aprenderemos a sacarle partido a nuestros puntos fuertes y disimular los que nos resultan menos atractivos. 

Preparé estas imágenes, para que puedas identificar cuál es tu tipo de silueta: