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Cómo planchar ¡en 3 minutos!

03.09.2020

  • Planchado
Debo confesarles que hoy me quedé dormida. Pero el problema, en realidad, no fue ese. El problema fue que como ayer no tuve tiempo de planchar las camisas de mi esposo, hoy debí levantarme un poco más temprano para hacerlo.
Pero ¡bueno!, ya les conté lo que pasó. Lo importante es que pude solucionar el problema rápidamente y mi esposo pudo llegar a tiempo a su reunión.

¿Qué hice? Planché solo el cuello y los puños de la camisa. Era la única opción que tenía en ese momento, ¡y la verdad es que a simple vista quedó muy bien! Por supuesto que le hice prometer a mi esposo que no se sacara el saco por nada del mundo. Y bueno, con esta trampita pude solucionar  el pequeño contratiempo de esta mañana.

Si alguna vez no tienes tiempo para planchar las camisas o blusas que necesitas, te recomiendo que hagas lo mismo que yo. Solo necesitas 3 minutos, lo que demora enchufar la plancha, montar la tabla de planchar y planchar el cuello y los puños.

Antes de empezar:
Acomoda la tabla de planchar. Comprueba que la has puesto a la altura de tu cadera.
Fija la temperatura. Asegúrate que la plancha esté a la temperatura adecuada para el tejido que tienes que planchar.
Ten todo a la mano. No olvides tener un pulverizador con agua para estirar las arrugas persistentes.

Ahora, empieza el planchado rápido: 
  1. Extiende el cuello de la camisa sobre la tabla de planchar y pasa la plancha por el interior. Luego, dóblalo y plánchalo ahora por el exterior, sobre todo a lo largo del doblez.
  2. Pon el hombro de la camisa sobre la tabla y plánchalo en dirección a la manga. Dale la vuelta a la camisa y plancha de nuevo de igual forma.
  3. Extiende uno de los puños sobre la tabla de planchar, con los botones mirando hacia abajo y plancha el interior con la punta de la plancha. Dale la vuelta y plancha ahora el exterior del puño. Evita planchar los botones, ya que podrían derretirse. Haz lo mismo con el otro puño.

Trucos adicionales
Para hacerlo más rápido, con el vapor de la plancha o con un pulverizador humedece ligeramente las camisas antes de plancharlas.
Para planchar los fruncidos, coloca la plancha sobre la abertura del fruncido y desliza la punta hacia arriba.